¿Qué es Warhammer 40k?

Miniaturas de guerreros futuristas o la frase “In the grim darkness of the far future, there is only war” han conseguido que más de una persona se pregunte qué es Warhammer 40k (a menudo abreviado como WH40k o 40k). Exiten muchas formas diferentes para definirlo, pero una de las más comunes es el hobby masivo que millones de personas practican y que combina el modelismo artístico, el coleccionismo, la literatura de ciencia ficción y un juego de estrategia de mesa englobado en la categoría de wargame: un tipo de juego que simula una situación militar, histórica o de conflicto, donde los participantes toman decisiones estratégicas y tácticas para enfrentarse a un oponente.

Aunque principalmente es este juego de mesa de estrategia con miniaturas, durante los últimos años han aparecido varios videojuegos inspirados en este universo que han ganado fans alrededor de todo el mundo.

Warhammer 40k: Definición

Warhammer 40k es un tipo de wargame, es decir, un juego de mesa que simula batallas entre ejércitos. A diferencia de los juegos de mesa tradicionales con fichas, en este ámbito se utilizan figuras en miniatura de plástico o resina que los propios jugadores deben ensamblar y pintar.

Cada jugador se encarga de construir su propio ejército durante su tiempo libre para presentarlo en el momento de la partida. Puede estar formado por docenas de soldados de infantería, tanques imponentes, vehículos voladores o monstruos gigantescos. Aunque normalmente los diferentes componentes de la figura son inmóviles, las figuras se mueven físicamente sobre un campo de batalla (tablero o mesa de juego) que el jugador decoran con escenografía (edificios, ruinas, piedras, tierra, etc.).

Las reglas dictan cómo se mueven las unidades, cómo resuelven los disparos y los ataques cuerpo a cuerpo (generalmente usando dados) y cómo se completan los objetivos. Por lo tanto, el hobby realacionado con Warhammer 40k se divide en tres pilares fundamentales:

1. Coleccionismo y modelismo: montar, personalizar y pintar las miniaturas y dioramas que se usarán en las partidas. Para ello, existe una gran variedad de materiales y utensilios que permiten llevar a cabo cualquier diseño que un artista pueda imaginar: masillas, pegamentos, bits de resina, herramientas de modelado, resinas, efectos de agua, efectos de nieve, pigmentos, elementos de escenografía de fantasía, etc.

2. Lore y narrativas: estudiar el extenso universo de ciencia ficción que sirve de telón de fondo para las batallas.

3. Juego estratégico: llevar a cabo partidas dentro del universo Warhammer 40k usando todos los recursos y las normas a disposición de los jugadores para derrotar al oponente.

¿Quién creó Warhammer 40k y cuándo salió?

La franquicia fue creada por la compañía británica Games Workshop, aunque antes de poner a la venta este juego, los tres fundadores comenzaron vendiendo juegos de mesa por correo, abriendo poco tiempo después la primera tienda física oficial en Londres. Fue en 1983 cuando aparece Warhammer en el panorama y, pocos años después, 40k. Aunque esto no es todo, ya que la compañía cuenta con más de 42 años de historia.

La primera versión de Warhammer 40k se lanzó en 1987 bajo el título completo de Warhammer 40,000: Rogue Trader. Fue concebida principalmente por Rick Priestley, quien, junto con otros diseñadores como Andy Chambers y Jervis Johnson, dotó al juego de una estética futurista decadente y una ambientación única.

Desde aquel primer lanzamiento, el juego ha evolucionado a través de numerosas ediciones. Cada nueva edición refina las reglas del juego y expande el lore, manteniendo la esencia de la guerra sin fin, pero adaptándose a las tendencias del wargaming moderno. Este proceso constante de renovación asegura que la pregunta “¿qué es Warhammer 40k?” siga siendo relevante para una comunidad en constante crecimiento.

¿Quién es el dueño actual de la empresa Warhammer?

La propiedad intelectual (IP) de toda la franquicia Warhammer, incluyendo 40k y su hermano de fantasía Age of Sigmar, pertenece a Games Workshop Group PLC. Esta corporación no solo fabrica y distribuye las miniaturas y las reglas, sino que también gestiona las licencias para el amplio abanico de productos derivados: desde las novelas de Black Library hasta la gran cantidad de videojuegos que exploran sus facciones. Su estricto control de calidad y narrativa es lo que ha permitido que el universo mantenga su cohesión y oscuridad características a lo largo de las décadas.

Este universo cuenta con sus propias características: reglas de juego, personajes originales, lore, tamaño de las figuras, etc. De hecho, la pregunta “¿qué es Warhammer 40k?” no se repite tanto en internet como "¿cuál es la escala de Warhammer 40k?"  Al igual que el juego de Warhammer, utiliza una escala de 28 mm a 32 mm (1:48 a 1:56 aproximadamente) como estándar para unidades de infantería. Además, cuentan con una escala especial conocida como 1:48 heróica, inventada para que ciertos personajes parezcan más corpulentos de lo normal o algunos objetos más grandes de lo que deberían para que contrasten dentro del resto de elementos del universo.

¿Cómo se juega Warhammer 40k?

Para saber cómo jugar a Warhammer 40k se requiere una combinación de reglas detalladas, estrategia y una pizca de suerte con los dados. Se necesita un tapete o tablero, una colección de miniaturas y una buena cantidad de escenografía.

El objetivo general no siempre es simplemente matar a todo el ejército enemigo (aunque eso siempre es satisfactorio), sino completar objetivos tácticos que varían en cada misión. Un turno se divide en cinco fases:

1. Mando: Se divide en Mando y Choque de batalla. La Fase de Mando sirve para consolidar posiciones, planificar acciones y usar puntos de mando para estratagemas, con un límite de un punto adicional por turno. Durante el Choque de Batalla, las unidades heridas deben superar una tirada de Liderazgo; si fallan, entran en conmoción, quedando inactivas para realizar estrategias y sin poder controlar ni disputar objetivos.

2. Movimiento: Permite mover unidades de forma individual: moverse, normalmente avanzar sumando un D6, permanecer inmóvil o replegarse si están en combate, teniendo en cuenta que avanzar o replegar limita disparar o cargar. La segunda parte, Refuerzos, permite desplegar unidades desde reserva según sus reglas, respetando distancias mínimas del enemigo; las que queden en reserva al final de la partida se consideran destruidas.

3. Disparo: En la Fase de Disparo, las unidades realizan ataques a distancia contra enemigos visibles, decidiendo cómo repartir sus armas y resolviendo impactos, heridas y salvaciones según las características de cada arma y unidad. Algunas reglas permiten disparar en combate o causar heridas especiales, y habilidades como No Dolor o salvación invulnerable permiten que ciertas miniaturas reduzcan o ignoren el daño recibido.

4. Carga: Una unidad a 30 cm o menos de un enemigo puede declarar carga, lanzando 2D6 y moviéndose esa cantidad de centímetros hacia la unidad enemiga para entrar en contacto peana con peana, respetando la altura del terreno; las unidades voladoras pueden cargar por el aire sobre otras unidades.

5. Asalto/Combate: Todas las unidades en combate cuerpo a cuerpo luchan alternando turnos entre jugadores; las unidades que cargaron usan "Combate Primero" y las miniaturas pueden realizar un movimiento de Amontonamiento para entrar en contacto con el enemigo. Tras atacar, la unidad atacante puede consolidarse moviéndose hasta 7,5 cm para acercarse a la unidad enemiga más cercana o a un objetivo si no hay enemigos próximos.

La profundidad estratégica es enorme. Cada facción tiene reglas especiales únicas que dictan su estilo de juego, lo que hace que un ejército de Marines Espaciales (pocos, pero poderosos) se juegue de manera completamente diferente a un ejército de Orkos (muchos, pero caóticos).

El objetivo no es solo eliminar al enemigo, sino también cumplir los objetivos de la misión, como controlar marcadores en "Solo Guerra" y obtener puntos de victoria. Lo más enriquecedor del juego es la narrativa y la estrategia: crear listas de ejército, combinar unidades y experimentar con sus habilidades, disfrutando tanto del planteamiento táctico como de ver cómo se desarrollan las batallas en la mesa, donde no siempre gana quien tiene las armas más potentes, sino quien mejor aprovecha las reglas y el terreno.

La respuesta a qué es Warhammer 40k es un universo de ciencia ficción grimdark, donde la civilización ha colapsado en una teocracia militarizada, pero existen muchos términos propios y lore con los que los principiantes deben familiarizarse.

¿Dónde comprar Warhammer 40k?

Para empezar, los aficionados compran los sets de inicio (que incluyen miniaturas, reglas básicas y dados) en tiendas de hobby especializadas o directamente en la tienda oficial.

Sin embargo, para participar plenamente en el hobby, la compra de materiales de modelismo es tan vital como la de las miniaturas. El verdadero atractivo de Warhammer 40k no es solo jugar con ellas, sino hacerlas tuyas. Las bases y los detalles de escenografía, los pigmentos para simular óxido o barro, y las herramientas de corte y montaje son lo que realmente permite a un aficionado crear un ejército temático y único. Es por ello que se recomienda acudir a una tienda especializada donde puedas comprar todo el material que necesites, como es el caso de la web online de Green Stuff World. Esta empresa, además, vende la mayoría de sus productos en plataformas como Etsy y eBay, así como en tiendas físicas revendedoras repartidas por todo el mundo.

¿Es 40k dark fantasy?

Sí, de hecho, Warhammer acuñó el término “grimdark” para describir esta fantasía oscura reflejada en el lema "En la oscura penumbra del lejano futuro solo hay guerra" (“In the grim darkness of the far future, there is only war”), el cual hace referencia a un tiempo de ambientación donde no existe la esperanza, las instituciones están corrompidas, la violencia es constante y el sufrimiento es parte estructural del mundo. Warhammer 40k refleja esta esencia profundamente dark fantasy: imperios decadentes que recuerdan reinos medievales, religiones fanáticas, seres demoníacos, magia disfrazada de psíquica y una humanidad al borde del colapso.

Son muchos los factores en los que se refleja esta fantasía oscura: no hay héroes puros, solo facciones impulsadas por la supervivencia, el poder o la destrucción; incluso los “buenos” cometen atrocidades para persistir un día más. La estética exagerada, la iconografía gótica, los dioses del Caos y la presencia constante de fuerzas sobrenaturales refuerzan esta sensación de oscuridad total.

Por eso Warhammer 40k no es solo un futuro distópico, sino el ejemplo perfecto de lo grimdark: un mundo donde la guerra es eterna, la muerte trivial y el destino inevitablemente trágico. Es esta mezcla de ciencia ficción con horror, fatalismo y simbolismo gótico lo que lo convierte en uno de los universos de dark fantasy más reconocibles y extremos que existen.

¿Cuántas facciones hay en Warhammer 40k?

Actualmente, existen alrededor de 30 facciones principales con reglas propias que se actualizan continuamente. Estas facciones se pueden agrupan en cuatro categorías:

Marines Espaciales

Los Marines Espaciales son soldados superhumanos genéticamente mejorados que protegen a la humanidad y constituyen la facción más icónica de Warhammer 40.000. Su ejército incluye tanto a los Marines clásicos como a los más recientes Marines Primaris, que son más altos, fuertes y mejor esculpidos, representando la versión más moderna del ejército en miniatura y juego. Para los nuevos jugadores, los Marines Primaris son la opción más recomendable, ya que combinan un mejor aspecto visual con un rendimiento superior en el juego.

Cada ejército de Marines Espaciales se organiza en Capítulos, subfacciones con estética, personajes y especializaciones propias. Algunos de los más conocidos incluyen los Ultramarines, que representan la visión clásica del Imperium; los Puños Imperiales, expertos en asedios; los Ángeles Oscuros y Ángeles de Sangre, que destacan por sus reglas únicas y unidades temáticas; y las Salamandras, que combinan fuego y defensa. Otros capítulos como los Lobos Espaciales, Cicatrices Blancas, Guardia del Cuervo, Deathwatch, Iron Hands y Caballeros Grises aportan estilos y tácticas muy diferenciadas, desde ataques rápidos hasta habilidades furtivas o caza de xenos.

Cada Capítulo cuenta con miniaturas especializadas que reflejan su estilo de combate, desde unidades de asalto cuerpo a cuerpo, francotiradores, hasta mechs y vehículos pesados. Las miniaturas Primaris han unificado gran parte del ejército en una escala y estética coherentes, aunque los Capítulos más antiguos todavía conservan personajes emblemáticos que aportan historia y tradición al juego. Esto permite a los jugadores personalizar sus ejércitos, creando destacamentos temáticos y únicos dentro del universo de Warhammer 40k.

Ejércitos del Imperio

Los Ejércitos del Imperio agrupan a todas las fuerzas humanas que sirven al Imperium, excluyendo a los Marines Espaciales, ofreciendo gran diversidad de estilos de juego y visuales. Estas facciones reflejan distintas bases del Imperio: la fe, la tecnología, la disciplina militar y la nobleza. Son un excelente punto de partida para jugadores que buscan explorar una amplia gama de estéticas dentro de la misma gran facción "imperial".

El Astra Militarum (Guardia Imperial) representa el lado más "humano" del Imperio. Es un ejército de masas compuesto por soldados comunes, apoyado fuertemente por tanques, artillería y vehículos, con una estética militar moderna. Su fuerza reside en el número y la capacidad de fuego, permitiendo a los jugadores experimentar cómo lucha el Imperio a escala planetaria, donde millones de humanos se enfrentan a amenazas galácticas.

Las Adepta Sororitas (Hermanas de Batalla) son el brazo militar de la Iglesia Imperial, monjas guerreras cuya fuerza emana de su fe absoluta. Su estética es marcadamente gótica y su estilo de juego se centra en la devoción y la resistencia moral. Por otro lado, los Adeptus Custodes son una élite militar casi invencible; son los supersoldados dorados y la guardia personal del Emperador. Su baja cuenta de miniaturas los hace atractivos para coleccionistas que buscan un ejército reducido, pero de gran poder.

Finalmente, el Adeptus Mechanicus encarna la tecnología del Imperio, con soldados biónicos y máquinas exóticas que combinan ciencia arcaica y misticismo mecánico. Por contraste, los Caballeros Imperiales son mechs de guerra gigantescos, pilotados por nobles feudales. Aunque son piezas visualmente espectaculares y poderosas, a menudo se integran como unidades individuales de apoyo en otros ejércitos imperiales en lugar de coleccionarse como ejércitos completos.

Ejércitos del Caos

Los Ejércitos del Caos representan la fuerza opuesta al Imperium en el universo de Warhammer 40.000, formados por Marines Espaciales traidores y demonios nacidos de la corrupción de los Dioses del Caos. Estos ejércitos surgieron tras la Herejía de Horus, cuando varias legiones de Marines Espaciales se rebelaron contra sus primarcas y se aliaron con los poderes del Caos en el Ojo del Terror. Desde entonces, han sido una amenaza constante para la humanidad y sus fuerzas del Imperium.

Cada ejército del Caos sigue la influencia de uno o varios de los cuatro grandes dioses: Khorne, dios de la guerra y la sangre; Nurgle, dios de la enfermedad y la decadencia; Tzeentch, dios de la magia y el cambio; y Slaanesh, dios del exceso y la obsesión. Esta diversidad de deidades otorga a los ejércitos del Caos una gran variedad de estilos y tácticas, desde berserkers sedientos de sangre hasta maestros psíquicos y hordas demoníacas que actúan según la voluntad de sus patrones.

Entre las facciones más conocidas se encuentran los Marines Espaciales del Caos, que son versiones corrompidas de los Space Marines leales; los Devoradores de Mundos, berserkers adoradores de Khorne; la Guardia de la Muerte, seguidores de Nurgle que prosperan en la resistencia y la putrefacción; y los Mil Hijos, expertos en psíquicos y magia de Tzeentch. Además, existen los Daemons del Caos, manifestaciones puras de cada dios que actúan tanto en 40K como en Age of Sigmar, y los Caballeros del Caos, gigantes mecánicos que reflejan a los Caballeros Imperiales pero al servicio del Caos.

Ejércitos de Xenos

El grupo de ejércitos Xenos (alienígenas) ofrece una rica variedad de especies, cada una con un estilo de combate y trasfondo únicos. Los Aeldari son una antigua civilización sofisticada, similar a los elfos, que destacan por su disciplina, estrategia y subfacciones especializadas (como los Drukhari y Harlequins). En contraste, los Tiránidos representan una amenaza biológica puramente instintiva; operan como un inmenso enjambre que consume toda la biomasa galáctica y es precedido por los Genestealer Cults, que son infiltrados humanos híbridos que preparan el terreno para la invasión.

Otras amenazas Xenos fundamentales son los Necrones y los Orkos. Los Necrones son una raza antigua e inmortal de cuerpos metálicos cuya táctica se centra en la reanimación constante de sus guerreros caídos y una organización dinástica despiadada. Por el contrario, los Orkos son criaturas caóticas y bulliciosas que encuentran alegría en la guerra; su peligro radica en su fuerza bruta, su inmenso número y su naturaleza totalmente impredecible en el combate cuerpo a cuerpo.

Finalmente, los T'au y las Ligas de Votann representan las facciones Xenos más tecnológicas y estructuradas. Los T'au son maestros de la tecnología y la estrategia a distancia, priorizando la cooperación para lograr el "Bien Supremo". Las Ligas de Votann (o Kin) combinan precisión técnica y gran resistencia, utilizando transportes pesados y unidades especializadas. Esta diversidad garantiza que cada ejército Xenos ofrezca una narrativa y un desafío táctico completamente distintos.

¿Quiénes son los buenos?

El consenso general en Warhammer 40,000 es que no existen los "buenos". El universo es una distopía de ciencia ficción, operando bajo el principio de la guerra total y la oscuridad ineludible. Aunque el Imperio de la Humanidad es la facción protagonista, su lucha por la supervivencia se basa en un régimen totalitario, fascista y fundamentalista que exige un sacrificio diario incalculable. La Inquisición y los Marines Espaciales actúan con una crueldad despiadada para mantener el dogma, haciendo del Imperio el "mal menor" en el mejor de los casos.

El debate de la moralidad se aborda a través de la relatividad. Algunos mencionan a los Orkos por su "felicidad" inherente al poder dedicarse únicamente a guerrear. Otros señalan al Imperio T'au por su promoción del "Bien Supremo", siendo la facción más idealista y menos abiertamente brutal, aunque su sociedad es autoritaria. En esencia, Warhammer 40,000 funciona como una sátira oscura del militarismo y la religión extrema, donde todas las facciones están irremediablemente corruptas o inherentemente malvadas. El conflicto, por lo tanto, no es entre el bien y el mal, sino entre distintas formas de horror galáctico.

El universo de Warhammer 40k: libros, videojuegos y series de TV

Aunque el juego de mesa es el producto más icónico de Warhammer 40k, está altamente ligado a libros de reglas e historias que permiten seguir el lore del juego y entender los acontecimientos que se han trasladado a la mesa de juego. Además, las peculiaridades únicas y bien diferenciadas de este universo han suscitado gran interés por el mismo en miles de personas por las historias relacionadas con 40k, lo que ha abierto camino a crear videojuegos y series de TV relacionadas.

¿Cuántos libros de Warhammer 40k hay?

Bajo el sello de Black Library, se han publicado cientos de novelas y libros de reglas, con un número que supera ampliamente los quinientos títulos, y sigue creciendo cada mes.

La serie de La Herejía de Horus por sí sola consta de decenas de volúmenes, detallando la guerra civil que dio forma al Milenio 41. Esta inmensa base de datos narrativa es esencial porque proporciona a los jugadores el contexto para sus batallas. Un jugador no solo está moviendo una figura; está recreando una carga legendaria de un regimiento famoso o defendiendo un planeta crucial mencionado en las novelas.

Videojuegos

El universo de Warhammer 40,000 ha generado una prolífica biblioteca de videojuegos que exploran la brutalidad del Milenio 41 en casi todos los géneros. Históricamente, la estrategia ha sido dominante, destacando la serie Warhammer 40,000: Dawn of War (Estrategia en Tiempo Real o RTS), que captura la escala épica de la guerra con la gestión de grandes ejércitos. Además, títulos como Chaos Gate - Daemonhunters ofrecen una experiencia táctica por turnos más enfocada en escuadras pequeñas y combate detallado.

La franquicia también ha incursionado con éxito en los géneros de acción y rol. Warhammer 40,000: Space Marine proporciona una perspectiva en tercera persona, enfatizando el combate brutal de un solo Marine Espacial. Por otro lado, juegos como Warhammer 40,000: Darktide se centran en la acción cooperativa en primera persona, arrojando a los jugadores a la lucha contra hordas en entornos claustrofóbicos. Esta diversidad demuestra la adaptabilidad del universo para que los jugadores experimenten la desesperación y la grandeza del Imperio desde múltiples ángulos.

Series de TV

El contenido audiovisual oficial de Warhammer 40,000 ha sido históricamente escaso, pero ha crecido recientemente. Gran parte del desarrollo animado actual se concentra en la plataforma propia de Games Workshop, Warhammer+. Esta plataforma ofrece series de animación serializadas como Hammer and Bolter y Pariah Nexus, además de la aclamada producción fan-made Astartes, que fue adquirida y sirve de referente para el nivel de calidad visual deseado.

El proyecto de mayor envergadura es la serie de televisión de acción real. Games Workshop anunció una alianza con la productora del actor Henry Cavill para llevar el universo 40K a la televisión de gran presupuesto. Aunque aún se encuentra en las primeras etapas de desarrollo, este proyecto representa el esfuerzo más ambicioso para introducir la escala épica y la oscuridad del Milenio 41 a una audiencia masiva, elevando la franquicia al nivel de otras grandes sagas de ciencia ficción.