PROJECTSPainted figures, sculptures and scale modeling projects

Antes de comenzar con la figura, y dado que ésta tiene una pose condicionada por el terreno, tuve que modelar la peana.

Utilicé una lámina de estaño (en este caso varias, porque no me quedaba ninguna del tamaño adecuado) para utilizarlo como base plana. La masilla se despega muy bien del estaño una vez endurecida. Coloqué una fina capa de masilla verde, para que sirviese como pegamento entre el estaño y la Super Sculpey Firm (de ahora en adelante la llamaré Firm a secas para agilizar). Se podría hacer sin la masilla verde, pero corremos el riesgo de que la Firm se despegue del estaño mientras modelamos.

Cubrí esta capa de masilla verde con Firm y cuando estuvo seca la verde (tras 2 o 3 horas aproximadamente), pude continuar añadiendo Firm para hacer la forma escalonada de la muralla.

El tema de modelar los ladrillos y piedras no tiene explicación realmente. Yo dibujé con una herramienta los ladrillos en su posición. En algunos añadí pegotillos de masilla y otros los dejé tal cual, para dar la sensación de que unas piedras están más salidas que otras y la construcción no es perfecta.

El armazón y posterior relleno será más fácil de hacer y que quede con las proporciones correctas si antes colocamos las armas que llevará. El escudo es opcional, pero lo hice todo a la vez ya que los procesos a seguir son similares.

Primero y muy importante, usé una mezcla de masilla verde con Magic Sculp aproximadamente al 50%. La razón es que la Magic Sculp proporciona una dureza adicional a verde, y a la vez mantiene la elasticidad de ésta última con lo que será menos probable que se nos rompan los mangos al limar.

Coloqué la masilla en una lámina de estaño y la aplané, con ayuda de la vaselina y que de esa forma resbalara bien para dejarlo lo más igualado posible en grosor. Después, y teniendo en cuenta las medidas de la figura, recorté la forma de las hachas directamente con la cuchilla. Con el escudo hice el mismo proceso, usando un compás para marcar la circunferencia antes de recortarlo con la cuchilla.

Las hachas las dejé endurecer completamente, mientras que con el escudo, continué trabajando con la masilla húmeda. Marqué con una herramienta las líneas divisorias entre tabla y tabla. Después, con una herramienta fina, y pasados 10 o 15 minutos en los que la masilla adquirió un poco más de dureza, hice las vetas de las tablas pasándola suavemente por encima y marcando en algunas más que otras. Esto lo dejé secar también.

Pasadas unas 24 horas, separé las láminas de estaño de las armas. Faltan retocar, pero antes limé las piezas para tener más limpieza a la hora de añadir masilla. El escudo simplemente repasé el canto un poco. En las hachas, limé la parte de la hoja para dejarla plana y el mango redondeado. Después de esto, hice otra vez mezcla de masilla para añadir un churrillo para el mango y engrosar un poco la hoja por el lado que estaba pegado a la lámina de estaño. El escudo lo cubrí por la otra cara, y repetimos el mismo proceso, con cuidado de que las líneas iniciales que delimitan las tablas coincidan con las de la otra cara.

Las hachas solo necesitan un pequeño limado para delimitar la zona del mango y la hoja, además de afilarla.

Al escudo le añadí una bola en el centro, que di forma de semiesfera y que será la zona done se introduce la mano. Por ese motivo, cuando se secó la masilla, excavé con el mini-taladro  la otra cara del escudo para formar un hueco, como se ve en la foto. Por último, añadí un churro aplanado para el borde del escudo, los remaches (dejando siempre endurecer una parte antes de seguir). También se pueden añadir unas barras metálicas transversales a las tablas del escudo, que serían los refuerzos.

Antes de nada, hice un “armazón” básico dibujado en un folio del tamaño que tendrá la figura, en este caso 120mm, para tener una superficie sobre la que montar el armazón con las correctas proporciones. Trencé dos alambres y los doblé siguiendo el patrón del dibujo. Corté el alambre en las piernas y brazos, dejando un pequeño extra de espacio para hacer los pies y enganchar el armazón a la peana en el caso de las piernas, y para sujetar las armas en caso de los brazos. Los pies los fijé a la base que hicimos antes y a su vez a un taco de madera y los afiancé con una gota de superglue y una bolita de masilla verde. Las armas se las coloqué también con masilla verde, rodeándolas un poco con el alambre para que no bailen.

Antes de pasar al relleno, toca hacer la cabeza y para ello trencé un alambre, lo cubrí con masilla verde y, acto seguido, una capa de Firm, tal como hice en la peana al principio del tutorial. Este es el proceso básico a seguir con este tipo de masillas en escalas pequeñas, ya que la verde sirve como nexo de unión entre el alambre y la Firm y a la vez proporciona una capa base dura sobre la que trabajar más fácilmente. Tras dejar secar la masilla verde de la capa inferior, comencé a añadir Firm teniendo siempre cuidado de respetar el tamaño que ha de tener la cabeza para estar proporcionada con el cuerpo, y dando a ñesta una forma de huevo invertido, pero plano en el frente, donde irá el rostro.

El primer paso es marcar las zonas más duras, es decir, los huesos. Primero ahuequé las cuencas oculares, arrastrando ligeramente la masilla hacia arriba para dar de esta manera volumen a las cejas. Con los dedos también marqué las hendiduras de las sienes y otras más en los carrillos, para marcar los pómulos y la mandíbula. Hay que tener en cuenta mirar siempre lo que sea que estemos modelando desde diferentes ángulos, procurando mantener la simetría en la medida de lo posible. El perfil es muy importante, no hay que olvidarse de él, pues muchas veces las caras quedan planas y son difíciles de pintar (además de que no es realista). En este caso, hay que fijarse en que las cuencas oculares no son meros huecos en la cara, sino que en los extremos exteriores llegan  hasta los pómulos.

Seguimos con las partes duras, añadiendo un triángulo para hacer el tabique nasal y un churro para marcar más las cejas. También añadí, tras fundir el triángulo que puse antes, dos bolitas para las fosas nasales. Recordad fundir todo bien con la herramienta y alisarlo con los pinceles de goma para que quede lo más limpio posible y de esa forma trabajar más cómodamente.

Para la boca, añadí dos churros, a la altura adecuada. Los fundí bien por los extremos superior e inferior, mientras que la unión de los churros la dejé bien definida, formando así los labios. Después es cuestión de buscar referencias e intentar copiarlas, ayudándose de los pinceles de goma y añadiendo y quitando masilla todo lo que necesites. Con dos churros finos que van desde la nariz hasta la comisura de los labios, hice las llamadas arrugas de expresión. De nuevo, es importante fundir y alisar bien a cada paso. Y como estáis viendo, los proceso son siempre los mismos: añadir churro o bola, fundir, dar forma y alisar.

Aproximadamente en este paso, antes de entrar con los ojos, yo suelo colocar las orejas, para tener una mejor guía y controlar mejor las proporciones. No hace falta detallarlas ahora si no se quiere, pero al menos darles la forma y tamaño correctos.

Para los ojos, la forma más sencilla es añadir dos bolas del mismo tamaño y, con un churro muy fino para el párpado superior y otro para el inferior (y echarle un buen rato tratando de que queden simétricos), se forma el ojo. Para este paso, una solución es darle la vuelta a la cabeza y trabajar de esa forma. Otro truco es, para los diestros, comenzar con el ojo izquierdo, ya que resulta más fácil copiarlo bien en el lado derecho (y al revés para los zurdos).

Las orejas no tienen truco alguno, al menos que yo conozca. Cada escultor lo hace de una manera y tiene sus manías. Yo empiezo haciendo el agujero del oído, marcar la doblez exterior de la oreja y, a partir de ahí, usando referencias, tratar de copiar la oreja. Hago hincapié en que busquéis todas las referencias y fotos posibles antes de empezar siquiera a modelar. Para las proporciones, los libros tipo “aprende a dibujar” van muy bien. Por otro lado, y como ya dije antes, hay que cuidar bien la limpieza en la medida de lo posible y no limitarse a añadir un churro, darle forma, y creerlo terminado. En ocasiones al hacer una parte, hemos de retocar o modificar otras, porque se nos haya ido de proporción o tamaño o simplemente porque la cara necesite ser engordada (o adelgazada).

Quise hacerle una mueca un tanto agresiva, por lo que modifiqué la boca. La abrí con una herramienta, arrastrando con cuidado la masilla hacia arriba y abajo y dejando a la vista los dientes. Es un proceso un tanto complicado que requiere haber realizado antes varias pruebas de rostros serios y saber cómo funcionan los músculos de la cara.

Una vez acabado, y bien liso, lo endurecí en el horno. Cuando hubo enfriado, lo uní al armazón con un pegotillo de masilla verde.

Toca rellenar el armazón con Firm. Como expliqué antes, el proceso a seguir es el de cubrir el alambre con masilla verde y después Firm encima, apretando bien para que queden unidas, y de esa forma quede bien agarrada al armazón. En ocasiones se puede usar papel de aluminio para envolver el armazón y a la vez que hace de agarre, ayuda a ahorrar masilla. Yo añadí una fina capa, aunque no se aprecie en las fotos. Además me ayudé de pegotillos de masilla verde para sujetar el papel de aluminio en aquellos lugares en que se pudiera separar, como los tobillos o las muñecas.

Es importante no hacer una capa muy gruesa, ni de masilla verde, ni de papel de aluminio, ya que corremos el riesgo de que al modelar, nos encontremos con ello y arruine nuestra figura. Si usáis masilla verde, recordad dejarla secar unas horas antes de proseguir. Así os evitaréis que se despegue.

El encaje hace referencia a la fase durante la cual no modelamos detallando, sino que abocetamos los volúmenes básicos de la miniatura. Comenzando desde las piernas y hacia arriba (para tener mejor control de las proporciones), fui añadiendo pegotes, plastas y churros de Firm sin fundirlos ni dejarlos lisos. Simplemente es un trabajo de “rellenar” el cuerpo. Es un proceso que debería ser rápido. En esta figura tardé unos 15- 20 minutos. Una vez satisfechos con el resultado, ya si, fundimos bien absolutamente todas las aplicaciones que hemos puesto. Este es el momento donde se comienzan a marcar o delimitar las principales zonas que serán más importantes a la hora de modelar y dejar bien hecha la anatomía y las proporciones, como es el caso de la caja torácica, las caderas y las articulaciones. 

Coloqué también más plastas de Firm alrededor de la cadera, para hacer el faldón de cuero que lleva sobre los pantalones y delimitar de esa manera el torso desnudo de las piernas vestidas, y así modelar más cómodamente cada parte. Este cinturón lo fui modificando a base de añadir tiras de Firm. Dejé unos espacios para hacer más tarde argollas que sujeten las tiras de cuero. Por otro lado, el cuerpo lo hice mediante el mismo proceso de siempre, y mirando referencias, que en el caso de la anatomía, es lo más importante.

El pantalón lo hice escarbando masilla y dejando las arrugas al mismo tiempo. Es una forma más rápida, pero realmente lo suyo sería colocar un churro donde va la arruga, fundirlo, alisarlo y repetir el proceso con una arruga diferente. También añadí un churro para delimitar la bota de los pantalones, fundido y alisado, y bien definido. El proceso a seguir con las arrugas de las botas es el mismo que con los pantalones, pero forzando más los pliegues, dejarlos más afilados. Obviamente, hay que respetar las zonas duras donde pega el pie con la bota, como los talones y los laterales, además de hacer la suela.

Con el torso y el cuello ya hechos, añadí el pelo. Cubrí con masilla verde el cráneo del vikingo y seguidamente con Firm, de nuevo para que sirva como pegamento. Después, mediante churros fui formando los volúmenes generales del pelo, y luego marcando grupos cada vez más finos con herramientas cada vez más finas también.   

Como se puede observar en las fotos, una de las piernas está sin masilla. Esto se debe a que la sujeción de la masilla verde en ese punto no fue buena. Quizás no apreté lo suficiente, o quedó alguna burbuja de aire que posteriormente se extendió al resto de la zona. Sea cual sea la causa, no importa que quede así. Cuando hayamos endurecido  la figura en el horno, podremos colocar de nuevo masilla verde, cubrirla con Firm y rehacer la bota. Ten en cuenta que esto requerirá hornearla otra vez.

Cuando acabé con el cuerpo, pasé a utilizar mezcla de masilla verde y Magic Sculp. Con esta masilla realicé prácticamente todos los detalles que faltan. Teniendo en cuenta el posterior despiece, le hice un brazalete de cuero en el brazo y una pulsera en la muñeca. También hice el cinto por encima del faldón, usando la misma técnica de añadir churro, aplanar y alisar. En este caso también será necesario recortar la masilla sobrante.

Además hice todos los remaches, tanto los de las botas como los del faldón de cuero, añadiendo bolitas minúsculas y modelándolas una a una.

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